Estaba una pastora
larán, larán, larito,
estaba una pastora
cuidando un rebañito,
cuidando un rebañito.
Con leche de sus cabras,
larán, larán, larito,
con leche de sus cabras
haciendo los quesitos,
haciendo los quesitos.
El gato la miraba,
larán, larán, larito,
el gato la miraba
con ojos golositos,
con ojos golositos.
«Si le hincas la uña,
larán, larán, larito,
si le hincas la uña,
te cortaré el rabito,
te cortaré el rabito».
La uña se la hincó,
larán, larán, larito,
la uña se la hincó
y le cortó el rabito,
y le cortó el rabito.
A confesar la falta
larán, larán, larito,
a confesar la falta,
se fue al padre Benito,
se fue al padre Benito.
«A vos padre me acuso,
larán, larán, larito,
a vos padre me acuso,
que le corté el rabito,
que le corté el rabito».
«De penitencia pongo,
larán, larán, larito,
de penitencia pongo,
que le des un besito,
que le des un besito».
El beso se lo dio,
larán, larán, larito,
el beso se lo dio,
y le creció el rabito,
y le creció el rabito.
Música original de Víctor M. Méndez